sarampión alemán. La rubéola, también conocida como sarampión alemán o sarampión de tres días, es una infección viral contagiosa. La infección aparece como un sarpullido rojo en la cara, el tronco y las extremidades, y luego desaparece unos días después. Antes de que la vacuna contra la rubéola estuviera disponible en 1969, los brotes de la enfermedad ocurrían cada 6 a 9 años.
En la actualidad, la rubéola es poco frecuente en lugares donde la vacunación es una práctica estándar. En los Estados Unidos, la vacuna contra el sarampión, las Paperas y la rubéola, o MMR, administrada a los niños dos veces antes de que alcancen la edad escolar, ha llevado a la erradicación de la enfermedad. Sin embargo, es importante que los padres se aseguren de que sus hijos estén vacunados. Si una mujer embarazada contrae rubéola, el virus puede causar graves defectos de nacimiento o incluso ser mortal para el feto.
¿Qué Causa la rubéola?
La rubéola es causada por un virus. Puede transmitirse en forma de gotitas en el aire, por ejemplo, al toser o estornudar, de una persona infectada. Los individuos pueden ser contagiosos hasta una semana antes de que aparezca el sarpullido y hasta una semana después de que desaparezca. Los bebés con síndrome de rubéola congénita pueden diseminar el virus de la rubéola en las secreciones respiratorias y en la orina hasta por 2 años.
¿Quién tiene más riesgo?
Estos factores aumentan el riesgo de contraer rubéola:
- No estar vacunado
- Una persona que no ha sido vacunada y que está en contacto cercano con bebés que tienen el síndrome de rubéola congénita (como en un hospital o en una guardería).
- Una persona que no ha sido vacunada que entra en contacto cercano con un gran número de personas de países que no vacunan rutinariamente contra la rubéola.
Signos y síntomas
Los síntomas suelen ser leves. En hasta la mitad de los casos, la enfermedad es tan leve que los síntomas son difíciles de identificar. El signo más distintivo de la rubéola son los ganglios linfáticos hinchados detrás de la oreja, en el cuello y en la parte posterior de la cabeza. Un sarpullido rosado suele ser la primera señal en los niños más pequeños. En los niños mayores y en los adultos, es más común tener fiebre baja, malestar (sentirse mal), pérdida del apetito, inflamación de los ganglios e infección de las vías respiratorias altas durante 1 a 5 días antes de la aparición de la enfermedad por completo.
Otros signos y síntomas incluyen
- Dolor articular. Esto es más común en las niñas y mujeres mayores y puede persistir durante semanas o, rara vez, meses.
- conjuntivitis (inflamación de la membrana alrededor del ojo)
- Dolor e inflamación de los testículos
- Picazón leve
- Sarpullido
- Dolor de cabeza
Qué esperar en el consultorio de su médico
El médico llevará a cabo un examen para buscar signos y síntomas comunes y puede realizar exámenes de sangre o cultivar una muestra de líquido de la nariz o la garganta para verificar la presencia del virus de la rubéola.
Opciones de tratamiento
Prevención
La vacuna contra la rubéola causa inmunidad en el 90 al 99% de las personas que la reciben. Los niños deben recibir 2 dosis[generalmente como parte de la vacuna combinada contra el sarampión, las paperas y la rubéola (MMR)] con un intervalo de al menos 4 semanas. Toda persona nacida en 1957 o después debe recibir al menos una dosis de MMR. Las personas nacidas antes de 1957 se consideran inmunes. Las mujeres en edad fértil deben ser vacunadas antes de quedar embarazadas, o someterse a una prueba de laboratorio para ver si son inmunes al virus, incluso si nacieron antes de 1957. (El haber tenido rubéola hace que la persona sea inmune de por vida.)
La vacuna contra la rubéola no debe administrarse a ninguna persona que:
- Tiene antecedentes de reacciones alérgicas graves a una vacuna anterior contra la rubéola u otra vacuna.
- Está embarazada o planea quedar embarazada
- Tiene un sistema inmunológico deficiente o suprimido
- Tiene una enfermedad de moderada a grave
- Ha recibido hemoderivados que contienen anticuerpos en los últimos 3 meses
Plan de tratamiento
No existe una terapia específica para combatir el virus de la rubéola. El tratamiento es de apoyo y la infección generalmente se resuelve por sí sola. Las complicaciones son raras. Se pueden tratar síntomas individuales, como fiebre, artritis y dolor articular.
Terapias con medicamentos
- Se puede tomar acetaminofeno (Tylenol) o ibuprofeno (Advil, Motrin) para reducir la fiebre.
- Un medicamento antiinflamatorio no esteroide, como el ibuprofeno, se puede utilizar para la artritis o el dolor articular.
- La aspirina u otros medicamentos que contienen salicilatos nunca deben administrarse a los niños porque aumentan el riesgo de desarrollar el síndrome de Reye, una enfermedad grave caracterizada por cambios en el hígado, vómitos y convulsiones.
Terapias complementarias y alternativas
La vacuna triple viral es la única prevención eficaz contra la rubéola. Ningún método de CAM ofrece inmunidad, pero algunas terapias alternativas pueden ayudar a aliviar los síntomas de la rubéola. Cualquier persona sospechosa de haber contraído la rubéola debe visitar a un médico convencional inmediatamente.
Nutrición Ningún ensayo clínico ha investigado el uso de alimentos o nutrientes específicos para tratar la rubéola. Sin embargo, los siguientes nutrientes pueden ser usados para apoyar el sistema inmunológico en general. Consulte con su médico para determinar la dosis adecuada para un niño, y no trate a su hijo sin supervisión médica.
Seguir estos consejos nutricionales puede ayudar a reducir los riesgos:
- Eliminar todos los alergenos alimentarios sospechosos, incluyendo los lácteos (leche, queso, huevos y helados), trigo (gluten), soja, maíz, conservantes y aditivos alimentarios químicos. Es posible que su proveedor de atención de la salud quiera hacerle pruebas para detectar alergias a los alimentos.
- Coma alimentos ricos en vitaminas B y hierro, como granos enteros (si no hay alergia), verduras de hojas oscuras (como espinacas y col rizada) y vegetales marinos.
- Coma alimentos antioxidantes, incluyendo frutas (como Arándanos, cerezas y tomates) y verduras (como calabaza y pimiento).
- Evite los alimentos refinados, como los panes blancos, las pastas y el azúcar.
- Coma menos carnes rojas y más carnes magras, pescado de agua fría, tofu (soya, si no hay alergia) o frijoles como proteínas.
- Use aceites saludables para cocinar, como el aceite de oliva.
- Reduzca significativamente o elimine los ácidos grasos trans que se encuentran en los productos horneados comercialmente, tales como galletas, galletas saladas, pasteles y donas. También evite las papas fritas, los aros de cebolla, los alimentos procesados y la margarina.
- Evite el café y otros estimulantes, el alcohol y el tabaco.
- Beba de 6 a 8 vasos de agua filtrada diariamente.
- Haga ejercicio moderadamente durante 30 minutos al día, 5 días a la semana.
Usted puede tratar las deficiencias nutricionales con los siguientes suplementos:
- Un multivitamínico diario, que contiene las vitaminas antioxidantes A, C, E, D, el complejo B y oligoelementos como Magnesio, calcio, zinc y Selenio.
- Ácidos grasos omega-3, como el aceite de pescado, 1 a 2 cápsulas o 1 a 2 cucharadas de aceite al día, para ayudar a reducir la inflamación y mejorar la inmunidad. Los ácidos grasos omega-3 pueden tener un efecto adelgazador de la sangre y pueden aumentar el riesgo de sangrado en pacientes que toman medicamentos adelgazadores de la sangre, como warfarina (Coumadin) y aspirina. Hable con su médico.
- coenzima Q10 (CoQ10), 100 a 200 mg a la hora de acostarse, para la actividad antioxidante e inmune. La CoQ10 puede aumentar la coagulación e interferir con la acción de los medicamentos anticoagulantes, como la warfarina (Coumadin) y otros.
- vitamina C, 1 a 6 mg diarios, como antioxidante. La vitamina C puede interferir con la vitamina B12, así que tome las dosis con al menos 2 horas de diferencia. Reduzca la dosis si se desarrolla diarrea.
- Suplemento probiótico (que contiene Lactobacillus acidophilus y otras bacterias beneficiosas), de 5 a 10 mil millones de UFCs (unidades formadoras de colonias) al día, para el mantenimiento de la salud gastrointestinal e inmunológica. Algunos suplementos probióticos pueden necesitar refrigeración. Algunos médicos están preocupados por la administración de probióticos a las personas que están gravemente inmunocomprometidas.
Las Hierbas están generalmente disponibles en forma de extractos estandarizados y secos (píldoras, cápsulas o tabletas), tés o tinturas/extractos líquidos (extracción de alcohol, a menos que se indique lo contrario). Mezcle los extractos líquidos con su bebida favorita. La dosis de té es de 1 a 2 cucharaditas/taza de agua amontonada y remojada durante 10 a 15 minutos (las raíces necesitan más tiempo).
- Extracto estandarizado de Rhodiola (Rhodiola rosea), 150 a 300 mg, 1 a 3 veces al día, para el apoyo inmunológico. Rhodiola es un «adaptógeno» y ayuda al cuerpo a adaptarse a diversos tipos de Estrés.
- Extracto estandarizado de uña de gato (Uncaria tomentosa), 20 mg, 3 veces al día, para inflamación y estimulación inmunológica. La uña de gato puede no ser apropiada para personas con enfermedad autoinmune o Leucemia y puede interactuar con varios medicamentos. Hable con su médico.
- Seta de hongo reishi (Ganoderma lucidum), 150 a 300 mg, 2 a 3 veces al día, para la inflamación y para la inmunidad. NO tome el hongo reishi por más de un mes sin tomarse tiempo libre. También puede tomar una tintura de este extracto de hongo, 30 a 60 gotas, 2 a 3 veces al día. Las dosis altas de Reishi pueden reducir la presión arterial y disminuir la capacidad de coagulación de la sangre. Las personas que toman medicamentos para la presión arterial o medicamentos anticoagulantes deben ser especialmente cuidadosas.
Homeopatía Pocos estudios han examinado la eficacia de los remedios homeopáticos específicos. Sin embargo, los homeópatas profesionales pueden recomendar uno o más de los siguientes tratamientos para la rubéola basados en su conocimiento y experiencia clínica. Antes de prescribir un remedio, los homeópatas toman en cuenta el tipo constitucional de una persona, incluyendo su constitución física, emocional e intelectual. Un homeópata experimentado evalúa todos estos factores cuando determina el remedio más apropiado para un individuo en particular.
- Aconitum, para personas que experimentan fiebre repentina, sarpullido y sed.
- La belladona, para la rubéola que aparece repentinamente, está asociada con fiebre alta, cara enrojecida y labios rojos, y calor que irradia desde la piel. Este remedio es más apropiado para las personas que transpiran mínimamente y pueden experimentar sueños extraños.
- Ferrum phosphoricum, este remedio se utiliza al principio de la enfermedad cuando los síntomas no son específicos y la fiebre es de leve a moderada. Los niños para quienes este remedio es apropiado tienden a estar cansados con la cara ligeramente sonrojada.
- Pulsatilla, para personas con fiebre y escalofríos que son peores en habitaciones cálidas y mejores al aire libre. Los síntomas tienden a ser menos intensos que para los otros remedios mencionados.
Acupuntura y Electroacupuntura (en la que los puntos de acupuntura se estimulan con electrodos) trató con éxito dos casos de deficiencias visuales y auditivas relacionadas con el síndrome de rubéola congénita (véase la sección de Consideraciones Especiales). La acupuntura también puede ayudar a aliviar el dolor articular.
Masaje El masaje terapéutico puede ayudar a aliviar el dolor articular.
Pronóstico / Posibles complicaciones
La mayoría de las personas que tienen rubéola se recuperan completamente sin efectos secundarios permanentes y son inmunes a la rubéola después. Este no es el caso de un feto infectado en el útero. La infección fetal puede causar efectos graves a largo plazo (ver la sección de Consideraciones Especiales).
Las complicaciones son más comunes en los adultos que en los niños y pueden abarcar
- Artritis o dolor articular. Ocurre casi exclusivamente en mujeres. Los dedos de las manos, las muñecas y las rodillas tienden a verse afectados. Esto se desarrolla junto con el sarpullido y puede tomar varias semanas para resolverse.
- Encefalitis (inflamación del cerebro). Es más común en los adultos (especialmente en las mujeres) que en los niños. La gravedad puede variar mucho. Hasta el 50% de las personas afectadas por esta complicación pueden morir a causa de ella.
- Sangrado interno, incluyendo en la piel, el tracto gastrointestinal, el cerebro o los riñones. Es más común en los niños que en los adultos. Esto puede durar días o, rara vez, meses.
- Inflamación de los testículos, nervios y cerebro
- Complicaciones del embarazo. La infección de rubéola durante el embarazo puede llevar a un aborto espontáneo o mortinato, así como al síndrome de rubéola congénita en el niño (ver la sección de Consideraciones Especiales).
Consideraciones especiales
Si un feto está infectado con rubéola en el útero, esto puede causar defectos graves conocidos como síndrome de rubéola congénita. Cuanto más joven sea el feto en el momento de la infección, mayor será la probabilidad de que se produzca el síndrome y de que los efectos sean más graves. Los efectos temporales del síndrome de rubéola congénita pueden incluir:
- Crecimiento lento en el útero
- Bajo peso al nacer
- Trastorno hemorrágico
- Sobrecrecimiento del hígado y del bazo
- Anemia
- Ictericia (coloración amarillenta de la piel, los tejidos y los fluidos corporales)
- Neumonía
Los efectos permanentes del síndrome de rubéola congénita pueden incluir:
- Sordera
- Defectos cardíacos
- Glaucoma y otros problemas de visión
- Discapacidad intelectual
- Trastorno de conducta
- Diabetes mellitus
- Enfermedad de la tiroides
- Deficiencia de la hormona del crecimiento